Un día como hoy
cuando el sol se escondía.
En la oscuridad de la noche,
un frío intenso aparecía.
No se entendía por qué,
cada noche y día nos repasaba.
Una luz fría y brillante,
que la vista te cegaba.
Se divisaba en aquellos paisajes,
del que las personas hablaban.
Un maleficio en esas enfermedades
que de quien y de donde venía.
Entrando la mañana fría,
ya sé sabia lo que hacer.
Todos hablaban de lo que parecía,
aquello se metía en el cuerpo, y mente.
Hasta que la vida se perdían.
Padre de Jesús